La bronquitis crónica es una inflamación del revestimiento de los bronquios, los conductos que transportan el aire desde la tráquea hasta los pulmones.
Se relaciona generalmente con el consumo de tabaco o la exposición a la contaminación del aire. Además, es un tipo de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC).
¿Qué es la bronquitis crónica?
Los tubos bronquiales transportan aire hacia y desde los pulmones. Las personas con bronquitis a menudo tienen una tos persistente que produce moco espeso y descolorido. También pueden experimentar sibilancia, dolor de pecho y dificultad para respirar.
La bronquitis puede ser aguda o crónica:
Bronquitis aguda: Se desarrolla a partir de un resfriado u otra infección respiratoria. Los síntomas duran menos de 3 semanas y a menudo mejoran en pocos días sin efectos duraderos.
Bronquitis crónica: Se clasifica como crónica cuando los síntomas, principalmente tos con flema, duran más de 3 meses en un período de 2 años. La inflamación constante en el revestimiento de los bronquios produce una acumulación excesiva de moco pegajoso en las vías respiratorias, lo que restringe la cantidad de flujo de aire que entra y sale de los pulmones.
Muchas personas con bronquitis crónica eventualmente desarrollan enfisema, que también es un tipo de EPOC.
Según la Asociación Estadounidense del Pulmón, más de 16,4 millones de personas en los Estados Unidos viven con EPOC. Sin embargo, hay muchas más personas que no saben que la han desarrollado.
La mayoría de los síntomas de la EPOC tardan un tiempo en desarrollarse, por lo que las personas pueden creer erróneamente que la afección no pone en peligro la vida e ignorar los síntomas hasta que la afección haya avanzado a una etapa más avanzada.
Aunque la afección no se puede curar, los síntomas se pueden controlar con tratamiento una vez que se diagnostica.
¿Cuáles son los síntomas de la bronquitis crónica?
Después de un largo período de inflamación e irritación en los bronquios, la bronquitis crónica puede causar varios síntomas característicos.
Síntomas comunes:
- Tos persistente (a menudo llamada “tos de fumador”)
- Expectoración de moco amarillo, verde o blanco
- Sibilancia
- Molestia en el pecho
Con el tiempo, la cantidad de moco aumenta gradualmente debido a su mayor producción en los pulmones. Este moco se acumula en los bronquios, lo que dificulta la respiración, especialmente durante la actividad física.
Otros síntomas:
- Fatiga
- Fiebre
- Infecciones respiratorias frecuentes y graves
- Sibilancia y crujidos al respirar
- Uñas, labios y piel azulados debido a niveles bajos de oxígeno
- Hinchazón en piernas y tobillos (edema periférico)
Los síntomas de la bronquitis crónica pueden variar en intensidad y frecuencia a medida que la enfermedad progresa. Por ejemplo, la tos puede desaparecer temporalmente, seguida de un período de tos más intensa.
Los episodios más graves pueden ser desencadenados por diversos factores, entre ellos:
- Infecciones de las vías respiratorias, como el resfriado o la gripe
- Infecciones en otras partes del cuerpo
- Exposición a irritantes ambientales, como contaminación del aire o polvo
- Problemas cardíacos
Causas de la bronquitis crónica
La principal causa de la bronquitis crónica es la exposición prolongada a sustancias irritantes, como el humo del tabaco, los gases tóxicos y la contaminación ambiental. Aquí tienes una lista de causas frecuentes:
- Infecciones respiratorias recurrentes: Infecciones virales o bacterianas frecuentes pueden dañar las vías respiratorias y provocar bronquitis crónica.
- Exposición al humo del tabaco: El tabaquismo activo o pasivo es una de las principales causas de la bronquitis crónica. La inhalación del humo irrita las vías respiratorias y causa inflamación crónica.
- Exposición a irritantes pulmonares: La exposición a largo plazo a sustancias irritantes en el ambiente, como gases químicos, vapores tóxicos, polvo o humo industrial, puede causar daño pulmonar y bronquitis crónica.
- Factores genéticos: Algunas personas pueden tener una predisposición genética a desarrollar enfermedades respiratorias crónicas, incluyendo la bronquitis crónica.
- Enfermedades respiratorias previas: Las personas que han tenido infecciones respiratorias graves en el pasado, como neumonía, pueden tener un mayor riesgo de desarrollar bronquitis crónica.
Impacto de la bronquitis crónica en la función respiratoria
A continuación, una lista con algunos de los efectos que la bronquitis crónica puede tener en la función respiratoria:
- Obstrucción de las vías respiratorias: La inflamación crónica de los bronquios puede provocar la estrechez de las vías respiratorias, lo que dificulta el flujo de aire dentro y fuera de los pulmones.
- Tos crónica: La bronquitis crónica se caracteriza por una tos persistente que puede durar al menos tres meses al año durante dos años consecutivos. Esta tos constante puede afectar la calidad de vida y dificultar la respiración adecuada.
- Producción excesiva de mucosidad: Los bronquios inflamados pueden producir una mayor cantidad de moco de lo normal. Esta acumulación de moco puede obstruir aún más las vías respiratorias, dificultando la respiración y causando sensación de opresión en el pecho.
- Disminución de la capacidad pulmonar: La obstrucción crónica de las vías respiratorias y la inflamación de los bronquios pueden provocar una disminución en la capacidad pulmonar. Esto significa que los pulmones no pueden inhalar y exhalar tanto aire como lo harían en condiciones normales.
- Falta de aliento: La dificultad para respirar es un síntoma común de la bronquitis crónica. Los pacientes pueden experimentar falta de aliento incluso durante actividades físicas leves o en reposo.
- Fatiga y debilidad: La falta de oxígeno adecuado debido a la obstrucción de las vías respiratorias puede provocar fatiga y debilidad generalizada en los pacientes con bronquitis crónica.
- Infecciones respiratorias recurrentes: La inflamación crónica y la acumulación de moco en los bronquios pueden aumentar la susceptibilidad a las infecciones respiratorias, como la neumonía y la bronquitis aguda. Estas infecciones pueden empeorar los síntomas y dañar aún más la función respiratoria.
¿Cómo se diagnostica la bronquitis crónica?
Para diagnosticar la bronquitis crónica, el médico o el profesional de la salud primero revisará su historia clínica, incluidos los síntomas y otras afecciones que pueda tener, y realizará un examen físico.
También pueden solicitar las siguientes pruebas:
Radiografía de tórax: Puede ayudar a descartar otras afecciones pulmonares, como la neumonía, que podrían estar causando la tos.
Análisis de sangre: Pueden utilizarse para buscar signos de infección.
Espirometría: Esta prueba de función pulmonar implica soplar en un dispositivo llamado espirómetro para medir el flujo de aire que entra y sale de los pulmones.
Gases arteriales en sangre: También llamada prueba de gases sanguíneos, mide la cantidad de oxígeno y dióxido de carbono en la sangre. El resultado indica al profesional de la salud qué tan bien pueden los pulmones transportar oxígeno a la sangre y eliminar el dióxido de carbono(1, 2).
Oximetría de pulso: Esta prueba mide el nivel de saturación de oxígeno en la sangre. Es una prueba sencilla que consiste en colocar un pequeño dispositivo en una parte del cuerpo, generalmente un dedo(1, 2).
Tomografía computarizada (TC): Toma una serie de radiografías que se pueden combinar para crear una imagen tridimensional de una parte del cuerpo. Este tipo de exploración puede solicitarse si el médico necesita una vista más detallada de los pulmones que la que proporciona una radiografía simple(1, 2).
Si bien no existe una cura para la bronquitis crónica, la enfermedad se puede controlar con tratamiento médico y cambios en el estilo de vida, especialmente si se diagnostica en etapas tempranas.
Tratamientos médicos:
Dependiendo de la gravedad de su condición, su plan de tratamiento puede incluir lo siguiente:
- Broncodilatadores: Estos medicamentos abren las vías respiratorias en los pulmones, facilitando la respiración. Se suelen inhalar a través de un dispositivo que bombea el medicamento a los pulmones. Un médico o profesional de la salud le mostrará cómo usar su inhalador correctamente para aprovechar al máximo el broncodilatador.
- Teofilina: Un medicamento oral que relaja los músculos de las vías respiratorias para que se abran más, aliviando las dificultades respiratorias. Un médico o profesional de la salud puede recetarlo en caso de dificultad respiratoria severa.
- Corticosteroides: Si los síntomas no mejoran con broncodilatadores o teofilina, un médico o profesional de la salud puede recetar corticosteroides. Estos medicamentos pueden tomarse inhalados o en comprimidos.
- Rehabilitación pulmonar: Un programa diseñado para mejorar la respiración y el bienestar general. Suele incluir ejercicios, asesoramiento nutricional y técnicas de respiración. Algunos programas también incluyen terapia psicológica. Un médico podría recomendarle participar en un programa de rehabilitación pulmonar en su área.
Pronóstico de la bronquitis crónica
Si bien no existe cura para la bronquitis crónica, hay tratamientos y terapias disponibles para manejar los síntomas. Además, ciertos cambios en el estilo de vida pueden ayudar a mejorar la calidad de vida.
El pronóstico de la bronquitis crónica varía mucho de persona a persona, dependiendo de varios factores, como:
- Gravedad de la enfermedad
- Respuesta al tratamiento
- Salud general
- Antecedentes o situación actual como fumador
Seguir las recomendaciones médicas puede ayudar a controlar la enfermedad y mejorar su calidad de vida.
Muchas personas descartan los síntomas de la bronquitis crónica, creyendo que simplemente tienen tos de fumador.
Sin embargo, es importante acudir al médico de inmediato si tiene la más mínima sospecha de que podría tener bronquitis.
No recibir tratamiento a tiempo para la bronquitis crónica aumenta considerablemente el riesgo de sufrir daños pulmonares graves, que pueden provocar problemas respiratorios o insuficiencia cardíaca.
Consulte a su médico de inmediato si su tos:
- Dura más de tres semanas.
- Le impide dormir.
- Está acompañada de fiebre superior a 38°C (100.4°F).
- Produce moco o sangre descoloridos.
- Causa sibilancia o dificultad para respirar.
Cómo prevenir la bronquitis crónica
Lo más importante que puede hacer para reducir el riesgo de bronquitis crónica es evitar o dejar de fumar. La inhalación prolongada de humo puede causar daños severos en los pulmones.
Dejar de fumar permitirá que sus pulmones comiencen a recuperarse y podrá respirar con mayor facilidad. También reducirá el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón.
Para obtener consejos sobre cómo dejar de fumar, hable con un médico o profesional de la salud o visite el sitio web de la Asociación Estadounidense del Pulmón (American Lung Association).
También es importante evitar otros irritantes pulmonares, como pintura, vapores tóxicos y polvo. Si trabaja en una industria donde está expuesto frecuentemente a estos irritantes, use una máscara que cubra la nariz y la garganta para proteger sus pulmones.
REFERENCIAS
2. Rennard SI, Vestbo J. Natural histories of chronic obstructive pulmonary disease. Proc Am Thorac Soc. 2008 Dec 15;5(9):878-83. doi: 10.1513/pats.200804-035QC. PMID: 19056710; PMCID: PMC2720106.
3. Corhay JL, Vincken W, Schlesser M, Bossuyt P, Imschoot J. Chronic bronchitis in COPD patients is associated with increased risk of exacerbations: a cross-sectional multicentre study. Int J Clin Pract. 2013 Dec;67(12):1294-301. doi: 10.1111/ijcp.12248. PMID: 24246208.
4. Zhang W, Lu H, Peng L, Ren X, Lu Y, An L, Zhang H, Tan X, Sun X, Huang K. Chronic bronchitis leads to accelerated hyperinflation in COPD patients during exercise. Respirology. 2015 May;20(4):618-25. doi: 10.1111/resp.12504. Epub 2015 Mar 19. PMID: 25799924.