¿Está bien hacer ejercicio todos los días?

Al elaborar un programa de entrenamiento, a menudo se recomienda un día de descanso semanal. Sin embargo, a veces puedes sentir el deseo de ejercitarte todos los días.

Siempre que no te exijas demasiado ni te obsesiones, entrenar todos los días está bien. Asegúrate de que sea algo que disfrutes sin ser demasiado estricto contigo mismo, especialmente durante períodos de enfermedad o lesión.

Analiza tu motivación para querer entrenar todos los días. Si consideras que tomarte 1 día te hará perder el ritmo y te dificultará encontrar la motivación para volver, entonces haz una versión más ligera o corta de tu entrenamiento en lo que sería un día de descanso.

Una regla general común es hacer 30 minutos de actividad física moderada cada día, lo que totaliza un mínimo de 150 minutos de ejercicio moderado cada semana. O puedes apuntar a un mínimo de 75 minutos de ejercicio intenso por semana.

Tipos de ejercicio

Si quieres intensificar tu rutina para alcanzar tus objetivos de fitness, salud o pérdida de peso, apunta a al menos 45 minutos de ejercicio diario. Incluye algún tipo de actividad de alta intensidad, como:

• Correr
• Ejercicios pliométricos
• Subir colinas

Si realizas cardio intenso o levantamiento de pesas, puedes descansar un día entre sesiones o centrarte en diferentes áreas del cuerpo en días alternos. También puedes simplemente variar tu rutina para no hacer ejercicio intenso todos los días.

Entrenamientos cortos vs. entrenamientos largos, ¿Cuál es mejor?

Es mejor hacer un entrenamiento corto cada día que uno o dos entrenamientos largos por semana.

Del mismo modo, es más ideal tener breves ráfagas de actividad a lo largo del día cuando no tienes tiempo para un entrenamiento más largo, en lugar de saltártelo por completo.

Ejercicios para incluir en tu rutina

Para obtener los mayores beneficios, incluida una menor probabilidad de lesiones, ten los cuatro tipos de ejercicio en tu rutina:

• Ejercicios de resistencia: Aumentan la frecuencia cardíaca y la respiración para mejorar el estado físico general. Ejemplos: trotar, nadar, bailar.
• Ejercicios de fuerza: Aumentan la masa muscular, fortalecen los huesos y ayudan a controlar el peso. Ejemplos: levantamiento de pesas, entrenamiento con el peso corporal, ejercicios con bandas de resistencia.
• Ejercicios de equilibrio: Ayudan a mejorar la estabilidad y prevenir caídas, además de facilitar los movimientos diarios. Ejemplos: ejercicios de equilibrio, tai chi, posturas de yoga de pie.
• Ejercicios de flexibilidad: Alivian las molestias físicas y mejoran la movilidad, la amplitud de movimiento y la postura. Ejemplos: estiramientos, yoga, pilates.

Beneficios del ejercicio

Los beneficios del ejercicio regular se extienden a todas las áreas de tu vida y bienestar general. Aquí te presentamos algunos:

Mejora el estado de ánimo: El ejercicio puede elevar tu estado de ánimo, motivación y niveles de energía. Es probable que logres más en todos los ámbitos de tu vida, lo que te llevará a sentirte satisfecho y realizado.

Relajación: Reduce la sensación general de estrés, lo que puede conducir a una mayor relajación, sueño de calidad y aumento de la confianza.

Vida social: El componente social de los entrenamientos en grupo te permite reunirte con amigos o conocidos en un entorno saludable y económico. Considera ejercitarte al aire libre, lo que tiene beneficios adicionales.

Función cognitiva: El ejercicio mejora la función cognitiva y te ayuda a despejar la mente. Puedes usarlo para desarrollar la atención plena y permitir la aparición de nuevas ideas y formas de pensar.

Control de enfermedades: El ejercicio regular ayuda a prevenir o controlar diversas afecciones de salud, como:

• Enfermedades cardiovasculares
• Diabetes tipo 2
• Presión arterial alta
• Síndrome metabólico
• Ciertos tipos de cáncer
• Artritis
• Caídas
• Depresión
• Ansiedad

Si tu objetivo es perder peso, el ejercicio regular también te ayudará a alcanzarlo y evitar recuperarlo una vez logrado.

Mantente motivado

Establecer objetivos y seguir un plan para alcanzarlos te ayuda a desarrollar motivación, disciplina y determinación, cualidades que se trasladan naturalmente a otras áreas de tu vida.

Entrenar todos los días está bien si buscas perder peso o completar un desafío que implique un entrenamiento diario.

Sé creativo en la forma de levantarte y moverte. Presta atención o registra cuánto tiempo pasas sentado diariamente o semanalmente. Haz lo que sea necesario para reducir ese tiempo. Considera lo siguiente:

• Trabaja en un escritorio de pie.
• Bájate del tren unas paradas antes y camina el resto del camino.
• Reemplaza las actividades sedentarias y pasivas por proyectos o actividades activas.
• Cuando permanezcas sentado por períodos prolongados, levántate durante al menos 5 minutos cada hora. Camina a paso ligero, trota en el mismo lugar o haz ejercicios de pie, como saltos de tijera, zancadas o círculos con los brazos.

Precauciones

Si entrenas todos los días o haces ejercicio intenso con frecuencia, debes tener en cuenta algunas medidas de seguridad:

Entrenar a diario puede provocar lesiones, fatiga y agotamiento. Todo esto puede llevarte a abandonar tu programa de ejercicio por completo.

Comienza con calma y aumenta gradualmente la duración e intensidad de cualquier rutina de ejercicio nueva. Escucha tu cuerpo. Reduce la intensidad de tus entrenamientos si experimentas:

• Dolores y molestias
• Dolor muscular intenso
• Sensación de malestar
• Calambres
• Náuseas
• Mareos

¿Cuándo consultar a un profesional?

Si necesitas un empujón extra o apoyo para alcanzar tus objetivos de fitness, no dudes en hablar con un profesional. Ellos pueden ayudarte a identificar tus fortalezas y ofrecerte consejos para mejorar.

Un plan personalizado puede ser un gran recurso, ya que te permitirá aprovechar al máximo tus entrenamientos de forma segura y efectiva. Un profesional del fitness puede observar tu técnica y corregir cualquier problema de alineación o ejecución.

Tómate tu tiempo para encontrar un profesional capacitado, experimentado y actualizado con las últimas investigaciones y tendencias del fitness. Una sesión de prueba te ayudará a ver si puede ayudarte a lograr tus objetivos de manera personalizada y efectiva.

Conclusión

Consulta con un profesional del fitness o la salud si eres nuevo en el ejercicio, tomas medicamentos o tienes alguna condición médica, incluidas lesiones.

Analiza tu situación. Si quieres entrenar intensamente todos los días, date permiso para descansar de vez en cuando.

Si abandonas fácilmente la rutina y un día de descanso se convierte en varios, esfuérzate por mantener el ritmo y haz algo de ejercicio, incluso en tu día de descanso.

En cualquier caso, lleva un registro de la frecuencia con la que entrenas y mantén el entusiasmo por tu progreso.